Gracias, gracias, gracias

Hola, persona al otro lado de la pantalla. Ha pasado muchísimo tiempo desde que escribí la última publicación por aquí.
Ni siquiera sé cómo comenzar, cómo expresar todo lo que quiero decir...
Ha pasado mucho tiempo desde que decidí abrir este pequeño lugar y muchas cosas han pasado desde entonces, las cuales han permitido que al mismo tiempo, yo haya ido cambiando también. He aprendido mucho. Me he perdido y me he encontrado.
Un día de noviembre del 2013, si no recuerdo mal, decidí publicar por primera vez y seguí durante mucho tiempo, feliz de poder compartir el mismo amor con otras personas, con ustedes, que parecían entenderme completamente. Durante esa época me sentía muy sola (digo que me sentía, porque realmente no lo estaba, solo que no era capaz de verlo) y este blog fue el lugar perfecto. Dejé de sentirme tan sola, tan diferente, porque veía que había gente con mis mismos intereses. Y así, este espacio fue perfecto para ese momento en mi vida, para reencontrarme, para amarme, para compartir con gente que me entendía. Este espacio me llenó y me hizo feliz.
Pero para crear contenido debía leer. Y los libros que leí me han formado en gran parte, porque aunque sean ficción, hacen que abras tu mente y te hacen crecer. No era que me molestara leer, al contrario, me gustaba escapar de donde estaba y viajar a otros lugares. Y no, nada tan trágico pasaba, solo la vida. Y la vida a veces se lleva a algunas personas que amamos, ya sea porque nuestros caminos se separan o porque es momento de que vayan a un lugar que nunca sabremos cuál es (el cielo, otro lugar en el que renace, etc.). 
Pasaron los años. 2014, 2015, 2016, 2017, 2018.
Aquí estamos ahora. Es raro mirar atrás y sentir que somos una persona completamente distinta que la que éramos hace 5 años o incluso hace un mes, gracias a todas las experiencias vividas.
Siento que esta etapa ya pasó para mí, que es momento de dejar este lugar y dejar de escapar tanto. Comenzar a vivir de verdad. Eso es lo que quiero ahora y me siento feliz, porque amo mi vida y me amo a mí. Quiero vivir nuevas aventuras conmigo misma, seguir descubriéndome.
En este momento puedo decir que siento que soy suficiente. El año pasado fue duro, pero extremadamente bueno. Fue mi último año de colegio, así que hubo mucho estudio y también reflexiones sobre mi futuro. Pero esto no fue todo, porque cumplí uno de mis sueños más grandes: tirarme en paracaídas. Además, viajé donde siempre había querido: EE.UU. (Disney y Miami). Otra cosa es que dejé de comer todo tipo de carnes y no me podría sentir mejor. Lo más importante de todo es que me di cuenta de que nunca estuve sola; ahora me siento más acompañada que nunca, por mí y por mi familia, pero también por amigos a los que logré acercarme mucho más, personas maravillosas que me llenan el alma y que espero poder seguir compartiendo con ellos hasta que el destino lo decida.
Este año está lleno de nuevos desafíos y metas. Voy a entrar a la universidad que siempre quise, a estudiar Derecho (mi sueño como desde los 11 años). Conoceré a personas nuevas y va a haber mucho estudio. Sin embargo, eso no significa que dejaré de disfrutar, de salir con gente que suma a mi vida, que me perderé conciertos, de dejar de compartir con mi familia. Al menos esos no son los planes. Quiero que este año haya de todo un poco y por eso decidí que la palabra que predomine en mi vida este año sea: EQUILIBRIO.
Así que sí. Creo que eso es todo. Elegí dejar abierto mi blog, porque me daría pena cerrarlo y hacer como que nunca existió. ¿Y quién sabe? Quizá algún día vuelva a escribir por aquí.
Por mientras, les deseo mucho éxito, felicidad y buenas vibras en sus vidas. Nunca se olviden de ustedes mismos y ámense.
Sigan leyendo, descubriendo nuevas historias, mundo y personajes maravillosos, que yo también lo haré.
¡Gracias por tanto!